El estratovolcán Llaima está ubicado en la Zona Volcánica Sur y presenta una forma cónica casi perfecta, aunque consta de dos cimas; la más prominente y maciza es la norte, con una altura de 3.125 m s.n.m. separada por una montura o portezuelo de 1 km de longitud de la cima sur, de 2,920 ms.n.m. La base del edificio volcánico compuesto tiene una forma elíptica, cuyo eje mayor de sentido norte-sur alcanza 30 km y su eje menor, este-oeste, unos 25 km. Sus derrames de lava han sido emitidos desde la cima, en un radio de 30 km, por lo cual este volcán abarca una superficie irregular de unos 700 km y alcanza un volumen aproximado de 400 km². El registro eruptivo histórico abarca desde el año 1640 hasta 1994, año de su última erupción, con 47 eventos documentados. Entre los fenómenos precursores descritos para la mayoría de las erupciones históricas, se menciona rudos subterráneos y actividad sísmica perceptible.
Los procesos volcánicos peligrosos serán caídas de piroclastos, flujos de lava y generación de lahares. Es probable que las erupciones estén acompañadas por emisiones de gases tóxicos, actividad sísmica local, deslizamientos locales, incendios forestales, tormentas eléctricas, obstrucción de cursos fluviales, avalanchas de nieve y alteraciones fisicoquímicas de aguas, suelos y vegetación. La probabilidad de ocurrencia de flujos piroclásticos, en el corto plazo, es más remota, pero es un proceso que no se puede descartar. La formación de lahares, debido a los extensos glaciares de sus flancos y al manto de nieve invernal que cubre la cumbre del volcán, será un proceso frecuente en las futuras erupciones.